La alondra Ricotí parece que se ha puesto bastante "de moda", no son pocos los amantes de las aves que se lanzan a ver si la suerte le sonríe un día y les deleita con un mutis entre la vegetación. Como dice la buena de Paola Laiolo "La alondra no te regala nada", y es cierto, este bichito te hace dejarte la piel y los sesos en las durísimas condiciones de la estepa.
He tenido el privilegio de haber podido trabajar con esta especie durante casi un año con el gran equipo de J. L. Tella, David Serrano, Paola, Matthias Vöghelii y María, lo que me ha permitido conocer a la especie y su problemática de conservación en profundidad, desde aquí no me queda más que agradecerles la oportunidad que me brindaron de trabajar con ellos.
Creo que muchas veces no se es consciente del estado de las poblaciones de alondras y de la fragilidad de las mismas.
La imagen: Las impresionantes "caídas libres" del pajarito después de remontar más de 130 metros.
